¿Víctimas, amigas, cómplices o servidoras a la nación?
Por Rodolfo Monroy
No votamos por ellas, pero vienen con ellos, con los Presidentes, en un mismo paquete…, y eso sí, como a ellos, las debemos aguantar seis largos años.
Son las primeras damas del país, aquellas mujeres que acompañan al presidente en turno durante su sexenio, las cuales vemos en la sopa… y hasta en el cabaret.
Algunas visten de lo más sencillo, con chales muy mexicanos, de color rosa mexicano o el sobrio negro; otras llevan sobre sus hombros un vestido de “marca” y del diseñador en boga, mientras que otras prefieren usar un logo que, entre más grande, mejor.
Aunque algunas vienen de buenas familias, son niñas bien y con estudios en el extranjero (no importa si tienen o no una licenciatura), estas primeras damas tienen sus mañas: mienten, son cómplices de sus maridos y también logran hacerse de un dinerito o de un negocio aunque los recursos provengan del erario público, de la “partida secreta”. Son dinosaurias, pues.
En su más peculiar estilo y fieles al cabaret, las Reinas Chulas actúan Las dinosaurias también roban, una sátira política musical que se presenta los viernes y sábados de mayo en el Teatro Bar El Vicio.
Con la dramaturgia de Las Reinas Chulas, en complicidad con el periodista y escritor Alberto Tavira y la conductora Fernanda Tapia, el espectáculo inicia alrededor de un funeral que se da en la residencia de Los Pinos.
Ahí, Angélica llora desconsolada por la muerte de su esposo, pero no se preocupe, pues, como buena actriz, sólo finge.
El fallecimiento del primer mandatario es inexplicable. La nación está en shock, el hecho parece inverosímil, pero todos —el espectador y el país— quedan tranquilos luego de que se les explica el deceso, ¡claro!, con “la verdad histórica” de los hechos.
Y como en esos niveles la forma y el protocolo cuentan, y mucho, otras ex primeras damas la acompañan en su dolor. Así, se reúnen Martita —quien aprovecha cada momento para hablar de los negocios de sus hijos, los “trabajadores jóvenes Bribiesca”—; Margarita —muy mexicana, comprometida con su causa (la Presidencia de la República) y crítica de los chairos–, y hasta Melamía Trump.
Con casi 20 años haciendo de las suyas como Las Reinas Chulas, Marisol Gasé, Nora Huerta, Cecilia Sotres y Ana Francis Mor deleitan a la concurrencia con su actuación. El libreto es actualizado cada función dada la rapidez con la que suceden las cosas en el mundo y en México. Los datos de la realidad nacional, que superan la fantasía, los aporta Beto Tavira.
Sus incisivos comentarios duelen, calan en lo más hondo, pero también hacen reír. Pues, para qué es el cabaret, sino para hacer catarsis, para quien lo hace y para quien lo consume.
Marisol está genial como Angélica; Cecilia es una excelente Margarita Salada que sorprende con cada frase que sale de sí, con su caminar, gestos y vestimenta; mientras que Nora hace a una divertidisima y cínica Martita Según. Ana Francis es la inocente e incrédula Melamía que está maravillada con nuestro país.
El cabaret es un espacio afortunado. Sirve no sólo para hacer sátira política, sino para reírse de personajes de diferentes ámbitos cuyo actuar no es del todo afortunado. Pero también sirve para reírnos de nosotros mismos y para eso, los mexicanos nos pintamos solos.
¿Víctimas, amigas, cómplices o servidoras a la nación?
“¡No, no. No somos mujeres! ¡No, no. No somos personas! ¡No, no. No somos reales! ¡Somos dinosaurias! Las dinosaurias también roban…”, dice la última canción del show. Una puesta que no debe perderse.
¿DÓNDE, CUÁNDO Y CÓMO?
- Las dinosaurias también roban
- Viernes y sábados de mayo a las 22:30 horas.
- Cover: 400 pesos.
- Teatro Bar El Vicio. Madrid 13, Col. Del Carmen, Coyoacán.
- Autoría: Fernanda Tapia, Alberto Tavira y Las Reinas Chulas.
- Elenco: Fernanda Tapia, Las Reinas Chulas: Marisol Gasé, Ana Francis Mor, Nora Huerta y Cecilia Sotres, y la participación especial de Alberto Tavira