Comodidad, resistencia, durabilidad e hipoalergénico son los principales atributos y características de las fibras de algodón, lo cual se agradece hoy en día en los que la gente pasa más tiempo en sus casas por la contingencia.
Por ejemplo, la tela de algodón deja pasar el aire y absorbe la humedad del cuerpo; de hecho se encarga de quitar la humedad de la piel casi como lo hace una toalla de algodón, de acuerdo a información de Cotton Incorporated. Lo mismo sucede cuando uno hace ejercicio pues evita que se acumule transpiración entre la piel y la ropa.
Cuando decimos hipoalergénico, nos referimos a que la ropa de algodón casi nunca genera reacciones alérgicas, de hecho se recomienda su uso a aquellas personas que tienen este tipo de problemas de piel. Es por ello que el algodón se usa también en productos médicos como las vendas, cubrebocas y gasas.
La comodidad de la ropa que usamos en el hogar también es importante.
La hecha con cien por ciento algodón ofrece una garantía de suavidad, además de que se estira fácilmente sin deformarse; no hay como unos pants y una playera de algodón para estar en casa. Las telas de algodón también son ideales para los bebés y los niños.
En reciente estudio realizado en Estados Unidos por Cotton Incorporated, ochenta por ciento de la gente encuestada aseguró que en estos momentos prefieren usar ropa cómoda y el 70 por ciento, prefirió la ropa hecha con cien por ciento algodón pues la consideran cómoda y de alguna forma les da seguridad.
De acuerdo a diversas pruebas, las vestimentas confeccionadas con esta fibra tienen una gran resistencia al desgaste. La resistencia de la ropa de algodón, que además no guarda olores, permite usarla todo el día y además lavarla prácticamente diario; de hecho, después de cada lavada se vuelve cada vez más cómoda.
En el caso de la ropa de cama, las sábanas, fundas y colchas de algodón además de ser resistentes a los ciclos que ofrecen las lavadoras y secadoras (no importa las altas temperaturas a las que sean sometidas), esta fibra funciona bien con los antibacteriales en aerosol, mismos que hoy en día se recomiendan usar antes de tender las camas. Además, hay estudios que indican que se duerme y descansa con ropa de cama de algodón, reduciendo incluso el estrés.
