Vivir solo e independizarse es el sueño de millones de jóvenes adultos mexicanos, con ánimos de adquirir su primera vivienda. Este proceso se ha idealizado como una vida sin reglas y “de color rosa”, como si de una película de Hollywood se tratara, para poder hacer fiestas todas las noches y no tener las mismas obligaciones de la casa familiar. Sin embargo, más allá del sentimiento de realización que te permitirá un hogar propio, hay ciertos aspectos que debes procurar antes de independizarte.
Entre la preparación de tus finanzas, considerar aspectos como la cercanía a tu trabajo, aprender a cocinar y otras tareas a realizar en el hogar, la realidad de vivir solo puede ser distinta como lo imaginaste. Para prepararte y que estés listos para ese momento, La Haus México, plataforma que ayuda, asesora y acompaña de forma gratuita al comprador de casa en CDMX te muestra los 10 aspectos que debes atender antes de tomar esa gran decisión.
Prepárate económicamente: Además del gasto de la mudanza, previamente debes cubrir el enganche de tu nueva vivienda, necesario para adquirir tu crédito hipotecario. Es necesario que cuentes con un trabajo que te permita ingresos estables y cubrir el pago del crédito, cuyo plazo va de 15 a 20 años.
Destina el 30% de tu sueldo al pago hipotecario: De acuerdo con Sergio Rojas, director de La Haus en México, debes aprender a organizar tu sueldo para costear tus necesidades y cumplir con el pago de tu crédito hipotecario. 30% se debe destinar a ello, por lo que gastos como alimentos, servicios, entretenimiento y ahorro deben ser posibles con el 70% de tus ingresos.
Contempla los servicios: Recuerda que los pagos de la luz, agua, gas e internet deben contarse en tu presupuesto de forma mensual, bimestral o trimestral. Además, considera lo que debes adquirir para acondicionar tu nuevo hogar: muebles, platos (de preferencia de cerámica), una batería de cocina (no la más cara) y electrodomésticos. Si no cuentas con carro, verifica cuánto gastarás en transporte público y el tiempo que tardarás en llegar a tus sitios habituales.
No olvides hacer el súper: Ya sea que lo hagas por mes o semana, trata de comprar lo necesario, puede que en un principio no lo domines, pero la práctica hace al maestro. Cuidado con los perecederos y compara precios para no salirte de presupuesto. Trata de cocinar en casa y no gastarte tu dinero en servicio a domicilio. ¡Intenta siempre consumir local!
Limpiar y acomodar es parte del proceso: Aparte del esfuerzo financiero, está el físico. Tendrás que lavar trastes (diario), barrer, trapear, hacer la cama, lavar la ropa, entre otras cosas. Es útil designar un día, usualmente uno libre, para hacer la limpieza general. Trata de no comprar muebles blancos ya que se manchan más fácil y recuerda separar la ropa en colores, blancos y delicados. Establecer tu nueva rutina, y cuidar de algo que ahora es tuyo será muy gratificante.
Aprende a cocinar: Parte de vivir solo es prepararte comida. Cocinar no se aprende a la primera, vas a quemar bastante comida para conseguirlo. Apóyate de páginas con recetas fáciles, rápidas y de bajo costo. ¡Cuidarte depende de ti!
La convivencia es complicada: Muchas veces el independizarte, es más sencillo con un amigo y puede ser una experiencia increíble, pero a la vez difícil. Compartir un espacio diariamente llega a ser cansado y deben lograr repartir responsabilidades. Elige a alguien con quien seas compatible. No olvides que tendrás que lidiar con vecinos o cumplir un reglamento de condóminos. Ten paciencia, muchos de los problemas se pueden evitar con una comunicación clara.Instala los complementos que necesites: Muchos departamentos no vienen con cortinas, tapas del W.C., o aditamentos de cocina. Revisa las condiciones de la iluminación y asegúrate de tener focos de led que, pese a ser más caros, te permitirán un ahorro para tu recibo de luz.
La decoración no viene incluida: Tener un departamento decorado y con todas las cosas que te gustarían, es un proceso largo. Toma tiempo, dinero y esfuerzo; sé paciente, compra y añade tus elementos favoritos poco a poco. En menos de lo que crees tendrás un espacio increíble.
Apóyate en un agente inmobiliario: Encuentra tu casa ideal a tu ritmo para asegurarte que elijas la mejor opción. Busca la ayuda de un experto que te asesore e inclínate por opciones como visitas virtuales y comparaciones de inmuebles para que tu nuevo hogar sea el que mejor se adapte a tus necesidades.
Todos estos aspectos pueden ser intimidantes y, si bien, independizarse no es cosa fácil, lo cierto es que todas las cosas positivas y que te permitirán crecer tienen sus retos. No te desanimes, mejor prepárate. Tu nuevo hogar te está esperando.